Nacho Palau, a por todas tras la resolución judicial: "Por mis nanos, lo que sea"
El fallo admite recurso y el valenciano no parará hasta conseguir su objetivo por el bien de los niños
¡A por todas! Nacho Palau no se rinde y recurrirá la resolución judicial que, en primera instancia, ha perdido contra Miguel Bosé en el juicio por la filiación de sus cuatro hijos. Fue el pasado sábado cuando, a través de su perfil de Instagram, el escultor daba a conocer la sentencia del magistrado. Un comunicado remitido por el despacho de sus abogados así informaba del fallo en el que se desestiman las pretensiones de filiación de los menores, pero sí se reconoce la intención de la expareja de fundar una única familia.
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Horas después de saber el dictamen judicial, el propio Nacho Palau ha atendido amablemente a los medios apostados a las puertas de su domicilio en Valencia explicando cómo afronta el futuro después de este varapalo. Admite estar tranquilo a pesar de que las cosas no hayan salido como pretendía. «El resultado ha reconocido que había un proyecto de familia. El tema de la filiación es algo más complicado». Pero es un luchador y va a por todas: «Por mis nanos, lo que sea», ha afirmado rotundo. La ex pareja del cantante, que recibió la sentencia en su casa de México, tiene previsto acudir a las instancias que sean hasta que se reconozca la filiación de sus cuatro hijos.
«Por mis nanos, lo que haga falta», así de rotundo se muestra Nacho Palau confirmando que recurrirá la sentencia /@nachopalau
Pero hasta el momento, y como también reza la sentencia, se llevarán a cabo un régimen de visitas de los niños entre sí y «para con sus padres respectivos». «No sé cuánto tardarán», ha explicado Palau a este respecto. Hasta la celebración del juicio el pasado 19 de octubre, Diego y Tadeo -hijos de Miguel-, e Ivo y Telmo -hijos de Nacho-, han mantenido contacto a través de videollamadas hasta que en verano, los cuatro se reencontraron físicamente aprovechando la estancia de los hijos de Bosé en España. Los pequeños viven separados desde que en 2018 la pareja anunció su ruptura. Por aquel entonces el intérprete de ‘Amante bandido’ se mudó al país azteca con sus mellizos, mientras que Palau se trasladó a su localidad natal, Chelva (Valencia), con los suyos.
Miguel y Nacho se vieron las caras en el Juzgado de Primera Instancia número 4 de la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón hace dos semanas, donde tuvo lugar la vista por el juicio de filiación de los 4 hijos de la pareja. Fue Palau quien interpuso una demanda con el objetivo de que se reconozca que los dos pares de mellizos nacidos durante su relación con el cantante son hermanos. Los niños no comparten ADN ni apellidos. Cada par de mellizos está reconocido por uno de los progenitores, pero durante ocho años convivieron juntos en la vivienda que posee el cantante en Somosaguas, a las afueras de la capital, y lo hicieron sintiéndose hermanos y sin distinción alguna entre ellos. «Lo que quiero es que los hermanos estén juntos», explicó el valenciano a la salida de los juzgados después de una jornada de declaraciones donde cada uno dio su versión, como él mismo contó.